“La seguridad en los toros es el principal quebradero de cabeza de cualquier alcalde”. Santiago Miguel de la Cruz Jiménez, alcalde de Nava de la asunción.
Trucos de magia habrá tenido que hacer el alcalde de Nava de la Asunción, Santiago de la Cruz Jiménez, para reducir cerca de 30000 euros del presupuesto de las fiestas patronales. Magia porque la crisis ha llegado también a los ayuntamientos y porque a primera vista en el programa oficial tampoco hay una reducción considerable de festejos o de la calidad de los mismos. Son las últimas fiestas de esta legislatura y el deseo de que todo salga bien es mayor que nunca. El tiempo, incluido el metereológico, lo dirá.
-¿Repercutirá este año de crisis en los festejos?
-Habrá una limitación presupuestaria evidente que haga que tengamos que ahorrar, aunque en algunos espectáculos es difícil ajustar el presupuesto, pero habrá que reducir gastos para poder hacer frente a la situación. Si el presupuesto del año pasado rondó los 200.000 euros, este año trataremos de que esté sobre los 170.000 euros.
-¿Cómo lo harán?
-Por ejemplo con otro sistema de gestión en los espectáculos de pelota, con lo que se conseguirá traer mejores pelotaris sin aportar el ayuntamiento directamente una cuantía. También en el pliego de condiciones de la contratación de verbenas, propusimos cambiar tres orquestas por discotecas móviles para rebajar la oferta, aunque al final se mantendrán dos de esas orquestas pero a un precio menor.
-También se ha suprimido la ya clásica vuelta ciclista, ¿era tan cara?
-Costaba cerca de 4000 euros, pero no es por el desembolso económico, sino por la categoría. El último año tuvimos dificultades al ser una de las últimas pruebas del campeonato de juveniles de Castilla y León. El club ciclista que ayuda a organizarla nos dijo que no encontraba gente para mantener el nivel. El adelanto de los estudios hace que no pueda venir un número de gente en condiciones, además para ciertos equipos coincide con la vuelta a España, es complicado. Ya buscaremos otra fórmula para dar cierta categoría a la prueba. Nos han propuesto hacer una contrarreloj femenina, pero se subía de presupuesto, quizás el año que viene.
-¿Es consciente de que algunos cambios no han gustado demasiado?
-Sé que poner el concurso de cortes el primer domingo a mucha gente no le ha sentado bien, pero había que equilibrar el presupuesto y así utilizaremos los toros para los encierros. Además, al quitar la novillada con picadores que no tiene mucha tradición, se ha conseguido traer un cartel majo para la corrida, quizás de los mejores que hay en la provincia, incluido Cuellar. Para los rejones se habló con Pablo Hermoso de Mendoza y Diego Ventura pero no podían porque los punteros son cuatro y están en todas las ferias. Así que fue más fácil encontrar una corrida de categoría.
-Acaba la legislatura, ¿Qué aspectos positivos y mejorables cree haber dejado a las fiestas como alcalde?
-Positivos, haber mantenido el nivel de lo que son las fiestas en momentos difíciles, no es fácil pero se ha mantenido un nivel muy digno, mejorando en los espectáculos taurinos, orquestas en la Calle Real con más participación en las verbenas. Y como aspectos mejorables, creo que no hemos sido capaces de conseguir que la juventud y las peñas participen más en los actos, que estén más en la calle, que vayan a los toros. Me hubiera gustado verlas participar más.
-Este problema se acrecienta con el paso de los años, ¿a qué cree que es debido?
-El sistema de peñas ha cambiado, hace años había cinco o seis peñas grandes, con muchos componentes y una edad mayor que tiraban de la juventud. Al desaparecer y crearse peñas pequeñas, los interlocutores del ayuntamiento se difuminaron mucho y no se tomaron iniciativas adecuadas.
Por otro lado la propia dinámica de la juventud. Hace 25 años todos estábamos esperando la llegada de las fiestas como algo único. Hoy los chavales están de fiesta todo el verano, se desplazan con más facilidad, antes se carecía de tantos medios. No hay esa disposición para colaborar que antes había.
-¿Se necesita mucho personal para que las fiestas salgan bien?
-Sí, bastante gente, especialmente para garantizar la seguridad como pueda ser el controlar las vallas en los encierros. Y aquí quiero agradecer a todos los que colaboran desinteresadamente, gente joven que ayuda, que echa una mano, y no es fácil porque están de fiesta.
-¿Dan mucha importancia a la seguridad en los festejos?
-La seguridad de la gente, especialmente en el tema de los toros, es el principal quebradero de cabeza de cualquier alcalde que ha pasado por aquí. Son espectáculos peligrosos como por desgracia se está viendo estos días, si a ello le añades la experiencia personal (su hermano falleció en el encierro nocturno de 1990) se entenderá que el momento que peor lo he pasado en los casi cuatro años que llevo en la alcaldía fuera en las primeras fiestas que organizamos, cuando un toro se quedó rezagado en el encierro nocturno durante más de una hora. Fue horroroso.
-Por último, ¿un deseo para estas fiestas?
-El deseo es el mismo que otros años, que las fiestas transcurran sin incidentes, que participe la gente, que lo pase bien y que aparezca esa capacidad de admitir como naveros a todos los forasteros que nos acompañen. El año y la época son difíciles pero debemos abrir un paréntesis en esas dificultades cotidianas intentando pasarlo bien, ese es mi deseo.