Adiós a Julio Baeza

Adiós a Julio Baeza
El mundo de la canción ha dicho adiós de forma repentina al cantante de Navas de Oro, Julio Baeza. El artista, padre de la también cantante Patricia Baeza, se mantuvo siempre en activo y actuó en infinidad de ocasiones en nuestro pueblo, donde era muy querido y donde siempre recordaremos su especialidad: la copla española. ¡Descanse en paz!

PREMIOS NAVA 2011





El Ayuntamiento de Nava de la Asunción se encuentra ya preparando la segunda edición de los Premios Nava tras la excelente acogida de la primera edición del año pasado. La gala de entrega se celebrará el próximo 15 de agosto en el Frontón Cinema, coincidiendo con la festividad de nuestra patrona, la Virgen de la Asunción.



























Los premios, estatuillas de barro que representan al Obispo Fray Sebastián, se dividirán en diferentes categorías, destacando los de educación con dos galardones a los mejores expedientes académicos en Enseñanza Secundaria y Bachillerato del Instituto Jaime Gil de Biedma. Este año se ha vuelto a contar con el Colegio Obispo Fray Sebastián para que una de las estatuillas fuera a parar al niño que concluyera sus estudios en el centro con mejores calificaciones. Tras el visto bueno de la nueva directiva, se ha producido un empate entre cinco pequeños, a los que se ha pensado homenajear en reconocimiento por su esfuerzo durante el curso.


Otro de los sectores galardonados será la hostelería, con la entrega de los tres premios del VI Concurso de Tapas que se está celebrando estos días por los diferentes bares de Nava. El premio de hostelería se otorga por votación popular, con urnas situadas en los locales participantes. Algo parecido ocurre con el Premio Nava destinado a reconocer a una persona o asociación en el ámbito social, cultural o deportivo, ya que se elige por el voto de los representantes de las diferentes asociaciones municipales. Un trofeo que el año pasado recayó en el C.B. Nava casi por unanimidad.



  
La lista de premios se completa con el que concede el equipo de gobierno a la persona o agrupación que a su juicio es merecedora de un reconocimiento público, ya que los galardones no tienen remuneración económica. La estatuilla del año pasado fue a parar al prestigioso poeta local, Luis Miguel Marigómez, a cuya extensa obra hay que añadir en los últimos años la coordinación del Premio Internacional de Poesía Jaime Gil de Biedma y Alba.
 








Todos los galardones se entregarán en una gala con diferentes actuaciones y en la que participarán varias de las más de veinte asociaciones de la localidad, además de las escuelas municipales de danza y música entre otros grupos. Tras su ausencia en la primera edición, la presencia de la Banda de Música de Nava  sin duda iba a dar un carácter mucho más solemne al acto pero finalmente el director se ha visto obligado a suspender la actuación por el reducido número de músicos disponibles para el día 15. Pese a este contratiempo, la Gala volverá a buscar la sorpresa de un público que ya abarrotó la sala en su primera edición. ¿Quién no recuerda a Sote entrando a caballo al cine, o a los chicos de Navabike con sus bicicletas, o a Benja con su moto por el pasillo central de la sala? Fueron tres grandes momentos que nadie esperaba.
Además, tras el estreno en la gala del año pasado del vídeo “La Nava te abre sus puertas”, en la del próximo día 15 se incluirán diferentes proyecciones con imágenes de la localidad, así como un repaso a los diferentes acontecimientos del año y el buen humor de varios mayores naveros que han dejado grabados sus recuerdos de juventud para la posteridad. Saludos de famosos, bailes regionales y alguna escena teatral completarán una entrega de premios que el equipo de gobierno navero no descarta ampliar en los próximos años. 


 Además, el ambigú del Frontón Cinema se volverá a convertir en un muestrario de la vida cultural local, ya que nuevamente se habilitará para que cada asociación con sede en el municipio, pueda mostrar las diferentes actividades realizadas durante el año.


RELOJ NO MARQUES LAS HORAS

 


Aunque al final me he decantado por un título más musical, en principio iba a titular esta entrada “Esas pequeñas cosas”, en referencia a los numerosos lugares de Nava de la Asunción que requieren pequeñas reparaciones y que al no considerarse de excesiva importancia se van dejando pasar y empeoran día a día. Uno de los casos más significativos es la iglesia parroquial.


Desde hace varios meses vengo observando cómo varias esferas del Reloj de la Torre van perdiendo sus números romanos. Y me surgen varias cuestiones, ¿quién tiene que hacerse cargo de repararlo?, ¿se tienen que quedar las esferas en blanco para arreglarlas?


Esto en lo que respecta al Reloj, pero ¿habéis visto cómo está el suelo del interior de la iglesia? La definición es ¡vergonzoso! Está levantado en numerosas zonas del templo y la única solución que se ha puesto hasta el momento es la colocación de alfombras. Ya se han caído varias señoras mayores y seguramente se seguirán cayendo.

La verdad es que no entiendo como la Iglesia no vela más por sus feligreses, pues teniendo en cuenta que cada día son menos, tendría que mimarles como si de una especie protegida se tratase.

Hace no muchos años se hizo una importante reparación de nuestra iglesia parroquial con bastantes buenos resultados, si exceptuamos el piso elegido para el interior que ya entonces fue bastante cuestionado por tapar todo el altar mayor, que era de un material mucho más elegante y resistente que el de ahora. Con el material elegido para el piso actual, a la larga se ha demostrado que casi ha sido peor el remedio que la enfermedad.





  









Algo que sí quedó muy bien en aquella restauración fue la escalera de la Torre del Reloj, la más antigua del templo y la zona del coro, donde se encuentra ese magnífico órgano que nadie ha escuchado nunca y que quizás no escucharemos jamás, pues el elevado coste de su restauración probablemente haya hecho que nunca se haya planteado nadie darle vida de nuevo.

Otra cosa que me extrañó mucho cuando se restauró la iglesia hace años, fue que se remodelasen todas las fachadas menos la parte más visible, justo la que da a la Plaza Mayor. ¿Quizás para no tener que quitar la lápida de los caídos en la Guerra Civil? Mejor dicho, de los caídos en el bando nacional durante la Guerra Civil. Esa lápida no debería estar en el muro de una iglesia. Esa fachada sigue deteriorándose con pintadas, desconchones en plena entrada principal, un olivo seco que nadie cambia y, como son pequeñas cosas, van pasando sin que nadie les preste mucha atención…



Por otro lado y afortunadamente, estos días estamos asistiendo a las primeras reparaciones en muchos años de la “Casa del Caño”, la antigua vivienda familiar del poeta Jaime Gil de Biedma. Aunque en principio sólo se iba a retejar, finalmente el mal estado de todas las maderas del tejado ha obligado a su completa sustitución.


Todos pensábamos que tarde o temprano ese trozo de nuestra pobre historia tendría que dedicarse a algo provechoso, y ya que temprano no ha podido ser, esperemos que tampoco lo sea demasiado tarde.





La iglesia y la Casa del Caño son los dos lugares que más pronto me han venido a la memoria, pero seguro que la gente que pasea a diario por nuestro pueblo sabrá de infinidad de pequeños rincones que no se merecen estar como están y que no costaría tanto repararlos…

¿TE ACUERDAS? "UN, DOS, TRES...RESPONDA OTRA VEZ 2020. ESPECIAL NAVA DE LA ASUNCIÓN"

ENTREVISTA EN LA 8 TV SEGOVIA