Aunque en un
principio estos dibujos surgieron como una forma de tener un detalle con
los amigos y familiares que tienen algo de ropa suya, en los últimos días
Claudia se ha visto sorprendida por numerosas peticiones de gente que los ha
visto en internet y quieren tener el suyo propio.
Antes de personalizar este tipo de diseños, las primeras
muñecas las ideó con trajes regionales y personajes de cuento. Así, surgieron
la chulapa, la flamenca, la de San Fermín o la de mantilla. E incluso toreros
como Castella. De ahí pasó a idear uno para el avatar de un perfil de Whatsaap
y luego ya vinieron los demás, con muchos de sus propios diseños y tratando de
incluir algunos rasgos físicos de la persona en quien están basados. ¿Los
reconoces?