“Tiene veintiún meses y todavía no se anda pero ya sabe acelerar su quad en miniatura, le encanta”. La familia del pequeño Eric, es fiel reflejo de la pasión que despiertan los quads para muchos aficionados a este vehículo que este fin de semana ha protagonizado su tradicional quedada anual en Moraleja de Coca.
A diferencia del frío
y la lluvia de las últimas ediciones, el tiempo primaveral que ha acompañado
este año a la VIII Quadquedada de Moraleja, ha permitido que se hayan celebrado
todas las actividades con un importante seguimiento de público y sin los
contratiempos meteorológicos de otras ediciones.”Está haciendo muy bueno, y eso
se nota porque ha habido más inscritos que el año pasado” comentan desde la
organización. De hecho el sábado a las tres de la tarde eran 108 los quads
participantes con veintitrés acompañantes apuntados y diecinueve niños. Una
cifra que cada año aumenta para satisfacción de los organizadores, la Asociación
Cultural La Olma, tras la que se encuentran casi 70 voluntarios.”Podemos decir
que es una de las quedadas más esperadas por todos los aficionados del mundo del
quad. La Quadquedada de Moraleja de Coca, se ha consolidado como una de las
mejores concentraciones de quad de todo el territorio nacional, no sólo
por su organización sino por estar hecha por y para los aficionados al quad”
señalan desde la asociación.
La seguridad es otro
factor importante que la organización de la quadquedada tiene siempre en cuenta,
con presencia constante de una ambulancia y material sanitario para posibles
percances. También cuentan cada año con la presencia de agentes de la guardia
civil del cuartel de Nava de la Asunción, “es importante que estén, pues con su
sola presencia se evitan excesos” comentan desde la organización. De hecho, el
año pasado hubo alguna denuncia por conducir algún quad indebidamente, hechos
aislados que en esta edición se han conseguido evitar.”Tratamos de ayudar en lo
que podemos, como puede ser en las
rutas, donde vamos cortando el tráfico por donde pasan” señala el sargento de
Nava.
Entre las actividades realizadas y como novedad, este año se
realizó una exhibición de crosscountry, en la que participaron pilotos como
Ramón Montoya, ganador de numerosas pruebas tanto en España como en Portugal o
Quique Pardo, ganador del último campeonato de Quadcross de Castilla y León.
Con el polvo como protagonista, también se incrementaron las
rutas, destacando la nocturna del sábado y la ya tradicional “un quad, un pino”
del domingo por la mañana. No faltaron las comidas de hermandad, las
proyecciones de fotos de años anteriores, la entrega de premios o la actuación
musical del grupo “Pinza flamenca”. Todo con un excelente ambiente del que
hacen gala los organizadores y que ya se ha convertido en seña de identidad de
esta reunión anual. “Año tras años vamos mejorando porque aprendemos de los
errores y realizamos encuestas para saber la opinión de los participantes, hay
que intentar mejorar” comentaba Bernardo Gómez, uno de los principales miembros
de la organización, poco antes de clausurar esta VIII edición de la que hace un
balance “muy positivo”.