Cientos de personas volvieron a
llenar la IV Feria Navastok 2015, celebrada en el pabellón polideportivo
y el salón de usos múltiples de Nava de la Asunción a lo largo de toda la
jornada del domingo. Como en años anteriores la feria se organizó con la
intención de promocionar el sector del comercio y la industria locales.
En esta edición la lluvia se
convirtió en incómoda protagonista y restó público respecto a ediciones
anteriores, “Cuando ves que el tiempo sale tan malo, te desilusionas un poco
porque el resultado no es el que esperas ya que vienen menos visitas de estos
años de atrás y lo que buscas es que haya mucha afluencia de gente aunque no se
venda.” Comenta Ana Arribas desde su expositor de muebles, destacando la
necesidad de acudir a esta feria anual para potenciar el comercio local de
Nava, “no hemos faltado ningún año de los cuatro que se ha hecho y seguiremos
el año que viene porque lo montas con mucha ilusión, disfrutas de tu trabajo y
para que la gente que viene disfrute también, se distraiga y vea lo que traes”.
Este año han sido cuatro expositores
menos que el año pasado, quizás como consecuencia de los cambios de fecha
previstos para la celebración de la feria, por lo que desde la junta directiva
intentarán que en años sucesivos el día de celebración se fije en el Domingo de
Ramos,“ es un día con mucha gente en el pueblo, todos de vacaciones y si este
año no ha podido ser, lo intentaremos el año que viene pero necesitamos más
colaboración del ayuntamiento” señalan desde la organización.
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Un año más el stand de Peluquería Tapia fue de los más concurridos |
Otra de las cuestiones más
comentadas durante el transcurso de la feria sigue siendo la ausencia de
expositores de determinados sectores del comercio navero y la posibilidad de
abrir la participación a comerciantes de fuera del pueblo, con el fin de tener
una mayor representación y dar un mayor servicio, “no me importaría pero si es
de negocios que no hay en el pueblo porque no me haría gracia que me pusieran
al lado una peluquería de fuera” comenta Patricia Tapia. Algo que desde su
expositor de electrodomésticos, no
parece importar a Javier Rodríguez, “no me preocupa la competencia porque está
bien para que la gente espabile y aprenda. Para ampliar la feria haría falta
sitio, ubicación y otro tipo de
organización más compleja. Se podría abrir también a cosas que aquí no hay,
como tractores por ejemplo”.
A medida que el día fue avanzando,
las ventas y la afluencia de personal fueron en aumento con la visita de
bastante gente de localidades cercanas “Yo sí que he vendido pero quizás porque
también he traído mucha variedad, de hecho terminé el último en montar el
expositor, ya de madrugada” comenta Roberto Cebrián quien destaca que hay
participantes de la feria “que vienen a que les vean y otros a vender o
intentar vender”.
La feria tenía previsto concluir a las
ocho de la tarde pero la gran afluencia de público de última hora, al parar la
lluvia, hizo que la organización retrasase el sorteo de 5000 euros entre todos
los que habían adquirido papeletas en los comercios e industrias participantes.
Tras conocerse el número premiado, el 0231, las tareas para desmontar toda la
infraestructura ferial se hizo en un abrir y cerrar los ojos porque a
primera hora de la mañana el pabellón debía volver a su uso habitual, el deporte.