Primer día después de Navidad y varias horas las que ha tenido que permanecer cortada al tráfico una parte de la calle Real, concretamente entre la ermita y el kiosco. La causa, el vertido accidental de numerosas vísceras y restos de animales muertos caídos desde un camión que los trasladaba hasta la planta de residuos orgánicos de Mudrián.
Al parecer el conductor no se habría percatado del vertido hasta que fue advertido por la guardia civil ya bastante lejos del término municipal.
Para solucionar el problema y evitar el hedor casi insoportable, se trasladaron hasta la zona varios camiones de arena y una pala excavadora, cortándose de inmediato el trozo de calle para facilitar los trabajos de retirada.
No se trata de la primera vez que ocurren vertidos de este tipo, ya que hace unos meses ocurrió un accidente similar junto al Banco de Santander, a escasos metros del ocurrido al mediodía de este día siete de enero. En esta ocasión, las quejas de los vecinos se han hecho evidentes, ya que el fuerte olor se introducía en las casas y reclaman que se ponga freno a este tipo de transportes por el centro del pueblo tanto por el olor como por los riesgos potenciales a la salud que podrían ocasionar, "no podíamos ni salir de casa de cómo olía. Y ya son varias veces las que ha pasado. Si tienen que pasar por Nava, que lo hagan por otro sitio pero no por el centro del pueblo" comentaba un vecino.
"La última vez les pusieron una multa de unos 7000€ por cargar en exceso el camión y puede que esta no se quede atrás" señalaba un camionero que también lleva sus camiones hasta Mudrián.
En la provincia de Segovia, de la recogida de animales muertos se encarga Digesnor, situada en el término municipal de San Martín y Mudrián. La empresa, pertenece al grupo Saria, una multinacional de origen alemán.
Al parecer el conductor no se habría percatado del vertido hasta que fue advertido por la guardia civil ya bastante lejos del término municipal.
Para solucionar el problema y evitar el hedor casi insoportable, se trasladaron hasta la zona varios camiones de arena y una pala excavadora, cortándose de inmediato el trozo de calle para facilitar los trabajos de retirada.
No se trata de la primera vez que ocurren vertidos de este tipo, ya que hace unos meses ocurrió un accidente similar junto al Banco de Santander, a escasos metros del ocurrido al mediodía de este día siete de enero. En esta ocasión, las quejas de los vecinos se han hecho evidentes, ya que el fuerte olor se introducía en las casas y reclaman que se ponga freno a este tipo de transportes por el centro del pueblo tanto por el olor como por los riesgos potenciales a la salud que podrían ocasionar, "no podíamos ni salir de casa de cómo olía. Y ya son varias veces las que ha pasado. Si tienen que pasar por Nava, que lo hagan por otro sitio pero no por el centro del pueblo" comentaba un vecino.
"La última vez les pusieron una multa de unos 7000€ por cargar en exceso el camión y puede que esta no se quede atrás" señalaba un camionero que también lleva sus camiones hasta Mudrián.
En la provincia de Segovia, de la recogida de animales muertos se encarga Digesnor, situada en el término municipal de San Martín y Mudrián. La empresa, pertenece al grupo Saria, una multinacional de origen alemán.